Diario de Ilona

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Back To Hell

“Ilona…Ilona” eran las terribles palabras que solía escuchar prácticamente todo el tiempo en su cabeza. La inocencia que había traído con ella, se había esfumado después de pasar más de un año en los Estados Unidos, su razón de vivir es su hermano, Mircea, quién aún lucha con su incontrolable final y su enfermedad ¿Hasta qué punto ella podría aguantar?
Una pregunta resurgía en su cabeza y mientras veía a aquellos seres sobrenaturales que vagaban por la tierra, sin percatarse de que ya no pertenecían al mundo de los vivos. Algunos simplemente se sentaban a observar a sus seres queridos, sin tener intención de acercarse más allá de sus posibilidades ¿Cuál era el fin? Quizá sin mencionar palabra alguna, era despedirse de esos seres que una vez había amado y albergar la esperanza de que en otra vida pudiera encontrarse o que el cielo los uniera para toda la eternidad. Otros sin embargo se empañaban en regresar a la vida y para ello necesitaban una médium, un ser humano que tuviera la habilidad de hablar y ser el anexo entre los vivos y los muertos.
La pequeña Rumana había vivido con ese don desde que nació. Le aterraba que aquel familiar tan conocido y por el cual se apellido le pesaba, se mantuviera aferrado a ella ¿Por qué? Era las preguntas que se hacía cada vez que lo veía desde el fondo de su habitación observándola desde allí, y luego con el tiempo descubrió que su apariencia era demasiado parecida a la esposa que Drácula había dejado tiempo atrás, e incluso llevaba el mismo nombre que Ilona portaba ¿Podría tratarse de una coincidencia? Hasta aquel momento todo le parecía demasiado extraño pero normal.
Cuando falleció su querida abuela, la rumana descubrió que ya no podía albergar más tristeza, si bien ella aparecía en sus sueños y la alentaba a seguir con sus estudios, de esa manera Ilona podría desprenderse del apellido del cual poco a poco comenzó a detestar, deseaba alejarse de esa leyenda urbana que habían creado algunos habitantes para aumentar la cantidad de turistas. Terminó la escuela superior y estaba decidida a estudiar historia, convertirse en alguien que pudiera decir la verdad acerca del sanguinario Drácula, príncipe de Valaquia y un pariente suyo, un vínculo de sangre que la unía y que incluso muchas veces se aparecía como una imagen borrosa.
Todo parecía que iba a ir viento en popa, pero descubrió que Mircea contraía una enfermedad que nadie podía decirle a ciencia cierta qué era lo que estaba albergando él, simplemente se moría. Ilona dejando todos sus sueños de lado, decidió que los Estados Unidos podría encontrarle una solución a todos sus problemas, estaba al tanto de la buena calidad de los doctores como los científicos que llevarían el caso. Sin pensarlo mucho más, Mircea e Ilona emprendieron el viaje más extraordinario.
La rumana se adaptó muy rápido a la vida que se llevaba en aquel país, sin embargo su hermano sentía la necesidad de regresar a su país, tras un año de un tratamiento en vano, Ilona tendrá que decidir.