Livila West [Ficha Personal]

LIVILA WEST

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Es perseverante y bastante obstinada, impulsiva. Pocas veces piensa antes de hablar. Sus ideas y pensamientos son compactos, imposibles de interrumpir cuando empiezan a expresarse. Es muy perceptiva, más allá de su habilidad, y absorbente con todo lo que percibe en su entorno. En ocasiones, se involucra en situaciones conflictivas por decir la verdad más de la cuenta, porque el tino no es su fuerte. A pesar de eso, la franqueza que la caracteriza le permite construir relaciones a prueba de desastres. Energética. Valiente. Está en su naturaleza analizar a los demás. En un principio, parece antipática y hasta desagradable porque es callada y no le gusta iniciar conversaciones. Cuando lo hace, queda en evidencia que está fingiendo, pues no es muy ocurrente a la hora de relacionarse con los demás. Repudia la mentira, lo cual es contradictorio con su condición pues ella misma tiene que ocultar todo el tiempo sus más profundos secretos. Su mayor debilidad es no tener en quién confiar sus cargas más pesadas, aunque sabe que si tuviese a alguien le sería muy difícil revelar sinceramente quién es en realidad. Le gusta dibujar sus sueños y leer en sus ratos libres, que no son muchos.

HISTORIA

Su vida nunca fue perfecta, al menos no que ella recuerde. Nació en Toronto. En su mente, los únicos recuerdos de una infancia feliz incluyen a su madre, Natalie y a su abuela, Susan. ¿Su padre? Nunca lo conoció, no tiene cara en sus recuerdos: es una sombra. Su madre nunca habló de él y, a los diez años, ella sintió que no era necesario preguntar por alguien que nunca había demostrado interés siquiera por conocerla. Nunca estuvo rodeada de amigos, sólo tuvo los necesarios. No era raro verla en un parque jugando sola, no necesitaba a nadie para divertirse. Su familia vivió en Toronto hasta que su abuela murió, cuando Livila tenía trece años, luego se mudaron a Chicago.

La primera aproximación con sus poderes llegó a la edad de diecisiete años, cuando Livila tuvo un sueño: vio a su madre enferma y, dos semanas más tarde, fue diagnosticada de cáncer. Ambas se mudaron a Kansas, en busca de la tranquilidad, huyendo de la ajetreada vida en la ciudad. Los tratamientos resultaron menos efectivos cada vez y Natalie comenzó a desmejorar. Livila dejó la secundaria para hacerse cargo de su madre y salir a trabajar, siendo el único sustento de la familia. Un año después, Natalie ingresó como paciente en un centro de cuidados especializados y no volvió a salir. Cayó en un coma profundo del que nunca despertó.

Errática por la vida, Livila tuvo que vender el apartamento que compartía con su madre para pagar parte de los tratamientos y comenzó a frecuentar moteles, en busca de abaratar costos. Entonces conoció a Noah, un empresario bastante más mayor que ella que parecía ser todo lo que necesitaba. Al principio, todo fue perfecto, él era la contención que ella buscaba pero más tarde, el alcohol, el juego y el maltrato cambiaron completamente el panorama. Livila huyó con lo poco que tenía dentro de un bolso y unos pocos billetes y cayó en las buenas manos de Trucker, el amable dueño de una cafetería que le dio refugio, trabajo y, más de una vez, el cariño de la familia que tanto necesitaba.

Sus poderes fueron creciendo a lo largo de los años y ella lo aceptó como algo natural, como su secreto más profundo, eso que nadie jamás podría saber sobre ella. Juró nunca exponer su naturaleza frente a otros hasta que comenzó a evidenciar que a su alrededor el mundo no era tan normal como aparentaba. Había otras criaturas deambulando en la noche, por la calle, en todos lados y ellos parecían percibirla como alguien diferente. Pronto, Livila se vio envuelta en una feroz cacería de la que varias veces tuvo la suerte, o la ayuda de alguien, de salir con vida. Aprendió acerca de demonios, cambia formas, hombres lobo, vampiros... Cazadores.

Aprendió a esconderse detrás de la fachada de la mesera rubia que sólo sabe servir café pero que, en realidad, puede manejar perfectamente un arma. Dejó de ser débil, se volvió atenta, audaz, un hueso duro de roer.
Su madre murió hace un año, poco es lo que recuerda (o trata de no recordar) sobre el pasado porque aprendió que si no mantiene los ojos en el presente, mañana podría no haber un futuro.

OTROS DATOS

· Su color favorito es el verde.
· Su fruta favorita son las uvas blancas.
· Le gusta dibujar.
· Es claustrofóbica.
· Cree mucho en las primeras impresiones. Si desconfía de ti, tarde o temprano el por qué saldrá a la luz.
· Su sensibilidad suele traicionarla.
· Es sobreprotectora con aquellos que ama.
· Odia el café negro.